¡Que nos quiten lo bailao!
Vamos a sincerarnos: la idea de un 2022 esperanzador nos anima y abruma por igual.
Según el Pronóstico Global de Reuniones y Eventos de 2022, informe anual elaborado por American Express Meetings & Events, este 2022 aumentarán las reuniones y eventos en persona además de que crecerá en un 64% el presupuesto de profesionales del sector. Concretamente Barcelona cerró el 2021 con confirmación de 150 congresos y ferias que se llevarán a cabo entre 2022 y 2023 con cerca de 400.000 participantes previstos. Sin embargo, la coletilla a todas estas cifras es: siempre que el Covid-19 lo permita.
Ya son 2 años, 730 días de incertidumbre, de mirar desde la ventana cómo sale el sol un poco antes de que el cielo vuelva a cubrirse por nubes. Mientras que las cifras de contagios y las medidas tomadas a finales del 2021 nos abrumaban de nuevo, vimos como la feria de turismo más grande de España, FITUR 2022, se celebraba presencialmente con éxito acogiendo en su edición 42 a casi 7.000 empresas procedentes de 107 países aumentando el número de sus participantes en un 39,7% respecto 2021. Con un mensaje de esperanza: Abrazamos el mundo. Somos turismo, José Vicente de los Mozos, presidente del Comité Ejecutivo de Ifema comentaba que "Hay que lanzar un mensaje de confianza. Ya hemos demostrado que es compatible viajar mientras superamos la pandemia y es lo que tenemos que seguir haciendo".
Y más allá del sector de los eventos, hoy, 11 de Febrero, se abre el ocio nocturno: discotecas, bares musicales y salas de conciertos, en la ciudad de Barcelona sin restricciones de aforo ni limitaciones horarias en los fines de semana.
Parece pues que con estas noticias, cifras, previsiones, medidas y mensajes de esperanza, es posible que éste sea el año en el que realmente recuperemos nuestro sector y el trabajo que veníamos haciendo antes de que esta pesadilla comenzara. Sin embargo, como hemos dicho antes, quizá por miedo o por prudencia nosotros preferimos ser cautos, pensar y proyectar a corto plazo e ir viendo qué sucede en esta montaña rusa. Disfrutemos hoy que mañana no se sabe y… ¡que nos quiten lo “bailao”!
